La decisión de los empresarios palmeros del departamento del Magdalena de aunar esfuerzos para enfrentar la crisis fitosanitaria se constituye en la garantía requerida para salvar a la palmicultura de una severa devastación.
Artículo publicado en el periódico PalmaSana, Edición N°16, septiembre 2017
En una trascendental determinación los núcleos palmeros del departamento del Magdalena se comprometieron a combinar esfuerzos para enfrentar la grave crisis causada por la Pudrición del cogollo con síntoma de Hoja clorótica (PC-HC).
“Nos comprometemos a aunar esfuerzos para mitigar, prevenir y controlar la problemática fitosanitaria generada por la enfermedad Pudrición del cogollo – Hoja clorótica (PC–HC), adoptando y ejecutando el Plan Estratégico de Manejo Fitosanitario propuesto en la reunión del Comité de Gerentes realizado el 28 de Agosto de 2017, en el Hotel Tamacá, Santa Marta”, dice explícitamente este acuerdo empresarial.
Al acuerdo se sumaron las extractoras: El Roble, C.I Tequendama, Frupalma, Palmaceite, Gradesa, Aceites y Padelma.
Según los compromisos empresariales, las acciones prioritarias que se desarrollarán conjuntamente son: manejo de agua, manejo de suelo y bajar presión del inóculo. “Sumado a lo anterior nos comprometemos a proponer y desarrollar acciones de apoyo a nuestros aliados estratégicos y/o proveedores de fruto de palma de aceite”, señala el documento. Y agrega: “Este acuerdo de voluntades se firma de buena fe y de manera voluntaria para hacer del cultivo de la palma de aceite un negocio rentable y sostenible en la Zona Norte del país”.
El Coordinador Nacional del Programa Sectorial de Manejo Fitosanitario, de Cenipalma, Julián Fernando Becerra-Encinales, ase-gura que el nivel de afectación en el departamento del Magdalena por PC-Hoja clorótica es de “niveles preocupantes” pero hay alternativas para evitar la devastación.
“Es perentorio entender que las palmas con síntoma avanzado de Pudrición del cogollo-HC tienen posibilidades mínimas de recu-peración y deben ser eliminadas. Mientras se mantengan palmas en pie con estas características, se está conservando el inóculo y, por lo tanto, la enfermedad se está intensificando. Además, hay que acentuar la atención al manejo de drenajes intra y extraprediales, esto es mantenimiento permanente y tecnificado y evitar a toda costa poner trancas. Es imprescindible no hacer esa práctica”, observa el ingeniero Becerra-Encinales.
Dice el experto que el punto crítico de la PC-HC está en el triángulo Aracataca-Fundación-El Retén, pero que se está expandiendo y las acciones se deben consolidar para evitar una catástrofe como en otras regiones del país. En la actualidad se han eliminado 700 hectáreas en el departamento del Magdalena entre palmas puntuales y focos enteros. “Se ha ganado terreno en enfrentar la crisis fitosanitaria, pero no es suficiente y debemos concentrarnos todos en cumplir a cabalidad el acuerdo”, explica el Coordinador del Programa Sectorial de Manejo Fitosanitario.
Factores que influyen en la crisis
Explica el ingeniero Julián Fernando Becerra, que se ha identificado que la PC con síntoma de Hoja clorótica está asociada a diferentes factores adversos a la palma de aceite, como la sequía extrema y suelos mal drenados. “Si tenemos niveles freáticos altos, encharcamientos, suelos compactados, mal manejo de los drenajes y trancas en los desagües naturales, es normal que haya Pudrición del cogollo con síntoma de hoja clorítica”. El funcionario de Cenipalma destaca el esfuerzo en todas las áreas de los núcleos y las tareas asumidas desde los comités agronómicos y de gerentes. “Las empresas están aportando recursos económicos importantes para el mantenimiento de drenajes. Eso ayuda enormemente para que se haga la labor requerida. No ha sido fácil eliminar las trancas por las características que algunas tienen, pero se está haciendo y es urgente concluir esas tareas”, puntualiza.
EN MANEJO DE AGUA: se tendrán en cuenta: estudios topográficos, diseño y costos, permisos ambientales, ejecución de obras, mantenimiento de drenajes.
EN MANEJO DEL SUELO: descompactación del suelo y fertilización adecuada.
PARA BAJAR PRESIÓN DEL INÓCULO: eliminación de focos, erradicación de palmas enfermas y control de Rhynchophorus palmarum.