“Para mí, el cultivo de palma ha transformado mi vida en todos los aspectos”
Rosa Matilde Orozco Carmona tomó una decisión que cambió su vida hace 24 años: apostarle al cultivo de palma con la esperanza de brindarle a su familia un futuro más estable. Lo que comenzó como una fuente de ingresos, pronto se convirtió en una verdadera pasión.
Gracias al esfuerzo y la disciplina que le ha dedicado al campo, Rosa ha logrado alcanzar el bienestar de su familia, quienes son su principal motor y motivación. “Para mí, el cultivo de palma ha transformado mi vida en todos los aspectos. Logré muchas cosas con esto: una solidez, una seguridad y una unión familiar”, expresa con orgullo.
Para Rosa, el éxito de un productor radica en realizar cada labor con dedicación, siguiendo las exigencias de su finca y aplicando las mejores prácticas sostenibles que aseguren la continuidad de su cultivo. Con ese mismo compromiso, Rosa busca transmitir sus conocimientos a sus hijos, motivándolos a continuar con ese gran proyecto que tanto esfuerzo le ha costado construir.